Rick Day |
El sexo es una celebración de nuestro cuerpo y nuestras sensaciones, y los juguetes sexuales son aliados perfectos para llevar el placer a nuevos niveles. Nosotros, hombres gays, tenemos la ventaja de estar más abiertos a experimentar, explorando desde el pene hasta el ano, y todo lo que hay en medio. Si quieres enriquecer tu vida sexual, ya sea en solitario o en pareja, aquí tienes una lista de juguetes que deberías probar.
Huevo masturbatorio: un abrazo texturizado. Este pequeño juguete es un clásico por una razón. Dentro de su carcasa de plástico hay una funda elástica con texturas diseñadas para rodear tu pene y proporcionarte una estimulación única. ¿Un plus? Si tú y tu hombre son activos, pueden usarlo juntos, introduciendo ambos sus penes en el huevo y disfrutando del roce íntimo.
Plug anal: el placer comienza en la base. Diseñados para estimular el ano, los plugs anales son versátiles y fáciles de usar. Su forma cónica facilita la inserción, y su base asegura que se mantenga en su lugar. Son ideales para usar mientras penetras o simplemente para intensificar la excitación previa al sexo.
Anillos para el pene: más dureza, más duración. Estos aros de goma, que se colocan en la base del pene, ayudan a mantener una erección más firme y duradera, aumentando la sensibilidad. Elige el tamaño correcto y no olvides lubricarlo para mayor comodidad. Ah, y si estás depilado, mucho mejor.
Dildos: tan real como lo imaginas. Los dildos son penes de goma que vienen en todas las formas, tamaños y colores. Algunos incluso son réplicas de actores porno famosos, diseñados para que la experiencia sea lo más realista posible. Puedes usarlos solo o con tu pareja para enriquecer la dinámica.
Estimulador prostático: directo al punto R. Este juguete está diseñado específicamente para alcanzar y estimular la próstata, que es el centro del placer masculino. Su forma anatómica garantiza que llegue justo al lugar donde se genera esa sensación única. Si nunca lo has probado, es hora de hacerlo.
Estimulador eléctrico: sensaciones que electrizan. Estos dispositivos, relativamente nuevos, emiten suaves pulsos eléctricos en la zona anal, proporcionando una estimulación distinta y profundamente placentera. Atrévete a probarlos y prepárate para una experiencia inolvidable.
Lubricante: el mejor acompañante. Ninguno de estos juguetes funciona sin un buen lubricante. Opta por uno a base de agua o silicona, dependiendo del juguete, y aplícalo generosamente para disfrutar sin molestias.
Explorar el placer con juguetes es un acto de autoconocimiento y confianza. Jugar no solo nos conecta con nuestro propio cuerpo, sino que también nos permite descubrir nuevas formas de disfrutar con nuestra pareja. Así que, ¿qué esperas para ampliar tu colección y darle un giro innovador a tus momentos íntimos? ¡La diversión y el placer están garantizados!